La crisis del parlamentarismo: Actividad de motivación

Tras la I Guerra Mundial, la mayoría de los países europeos tuvieron que hacer frente a una gran demanda social que tendía a la democratización de los regímenes liberales.

En España, también se produjo una creciente presión para democratizar el sistema de la Restauración y adoptar medidas reformistas, hecho que reflejaba la existencia de una opinión ciudadana cada vez más movilizada y crítica. Sin embargo, este proceso estuvo dificultado por el miedo de los sectores más conservadores de la sociedad, por la presión revolucionaria del movimiento obrero y campesino y por el impacto de la Revolución Rusa. La inestabilidad de los gabinetes dinásticos, el creciente divorcio entre las Cortes y los gobiernos y la extensión y agudización de las tensiones sociales sirvieron de excusa para que, en 1923, los militares impusieran una solución autoritaria.